El 10 de marzo de 1959, miles de tibetanos se levantaron en Lhasa ante la ocupación china.
Desde entonces, el 10 de marzo se ha convertido en uno de los días más reivindicativos y de acción no violenta, tanto para el pueblo tibetano como para las organizaciones que apoyamos su causa y su lucha pacífica.
Desde hace varias décadas, miles de municipios de todo el mundo izan la bandera nacional tibetana, prohibida en el Tíbet ocupado, como muestra de apoyo al pueblo tibetano. Cada día diez de marzo, las banderas son visibles en las casas consistoriales de los municipios, en edificios públicos y también en miles de ventanas y balcones de indivíduos que se unen a la campaña, enviando un mensaje directo al gobierno chino: la comunidad internacional apoya al pueblo tibetano y espera que China restaure los derechos humanos de este milenario pueblo.
La ONG Phagma DRÖLMA también participa en esta campaña, promoviéndola a nivel institucional, con el fin de lograr que la bandera nacional tibetana esté ese día visible en ayuntamientos y edificios públicos vascos. Además, también promueve la realización de declaraciones institucionales y aprobación de mociones en los plenos de los ayuntamientos y otras instituciones como las Juntas Generales de Gipuzkoa, en las que se reconozca la grave violación de los derechos humanos del pueblo tibetano, así como la legitimidad del Gobierno Tibetano en el exilio, y se le pida al gobierno chino voluntad política para restaurar los derechos y libertades del pueblo tibetano y negociar una resolución pacífica del conflicto con el gobierno tibetano.