Larung Gar se encuentra en el Tíbet, y es el Centro Budista Tibetano más grande del mundo.
En este monasterio, hoy por hoy, miles de monjas y monjes budistas están luchando pacíficamente por preservar sus hogares.
1500 casitas donde residen estas monjas y monjes van a ser demolidas ilegalmente antes del 30 de octubre, según lo programado por las autoridades chinas. La destrucción ya ha comenzado, amenazando la cultura y práctica religiosa del Tíbet.
Una joven monja tibetana llamada Rinzin Dolma se suicidó el pasado 20 de julio, primer día de las demoliciones. Dejó una nota explicando que “no podía soportar el dolor del acoso interminable ejercido por China sobre inocentes budistas que estudian silenciosamente en el centro”. Dos monjas más se han suicidado en los días posteriores.
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